A Cristo en la Cruz
¡Oh vida de mi vida, Cristo santo!
¿adónde voy de tu hermosura huyendo?
¿Cómo es posible que tu rostro ofendo
que me mira bañado en sangre y llanto?
A mí mismo me doy confuso espanto
de ver que me conozco y no me enmiendo;
ya el Ángel de mi guarda está diciendo
que me avergüence de ofenderte tanto.
Detén con esas manos los perdidos
pasos, mi dulce amor; ¿mas de qué suerte
las pide quien las clava con la suyas?
¡Ay Dios!, ¿adónde estaban mis sentidos,
que las espaldas pude yo volverte,
mirando en una cruz por mí las tuyas?
¡Oh vida de mi vida, Cristo santo!
¿adónde voy de tu hermosura huyendo?
¿Cómo es posible que tu rostro ofendo
que me mira bañado en sangre y llanto?
A mí mismo me doy confuso espanto
de ver que me conozco y no me enmiendo;
ya el Ángel de mi guarda está diciendo
que me avergüence de ofenderte tanto.
Detén con esas manos los perdidos
pasos, mi dulce amor; ¿mas de qué suerte
las pide quien las clava con la suyas?
¡Ay Dios!, ¿adónde estaban mis sentidos,
que las espaldas pude yo volverte,
mirando en una cruz por mí las tuyas?