Poema - 44 - de Heinrich Heine

- 44 -

¿Siempre repetirás, oh caro amigo,
una misma canción?
¿Siempre estarás inmóvil empollando
los huevos rancios de tu añejo amor?
Los polluelos la cáscara quebrantan;
pían, brincan después, corren al sol;
y atrapándoles tú -¡pobres polluelos!-
en tus libros les das jaula y prisión.