Poema: los piratas de Rubén Darío

Remacha el postrer clavo en el arnés. Remacha
el postrer clavo en la fina tabla sonora.
Ya es hora de partir, buen pirata, ya es hora
de que la vela pruebe el pulmón de la racha.

Bajo la quilla el cuello del tritón se agacha
y la vívida luz del relámpago dora
la quimera de bronce incrustada en la prora,
y una sonrisa pone en el labio del hacha.

La coreada canción de la piratería,
saludará el real oriflama del día
cuando el clarín del alba nueva ha de sonar

¡glorificando a los caballeros del viento
que ensangrientan la seda azul del firmamento
con el rojo pendón de los reyes del mar!